20.11.04

Pau, el bisabuelo de la humanidad

LA EVOLUCIÓN DEL CUERPO HUMANO
Pau, el bisabuelo de la humanidad
El antropoide es uno de los eslabones perdidos en la evolución de los primates

El análisis de los fósiles descubiertos en el 2003 en Els Hostalets de Pierola indica que Pau es antepasado común de humanos, chimpancés, orangutanes y gorilas




POSICIÓN VERTICAL

Los fósiles abren una ventana a la época en que los primates adoptaron la posición vertical
UNA NUEVA ESPECIE
Los científicos le han bautizado 'Pierolapithecus catalaunicus', que significa simio de Pierola catalán
ENTUSIASMO CIENTÍFICO
Los especialistas en evolución humana elogian el hallazgo
MÁS FÓSILES
"Aún quedan muchos fósiles por extraer" afirma Salvador Moyà

JOSEP CORBELLA - 19/11/2004

Barcelona

Pau, el antropoide de hace trece millones de años hallado el año pasado en Els Hostalets de Pierola (Anoia), es uno de los eslabones perdidos más importantes en la evolución desde los monos cuadrúpedos hasta los humanos bípedos. Según anuncian hoy en la revista Science los paleontólogos Salvador Moyà y Meike Köhler, que han analizado los fósiles de Pau durante un año, el antropoide es el antepasado común de los humanos y nuestros primos chimpancés, gorilas y orangutanes.

La investigación aporta datos sobre uno de los periodos más importantes y menos conocidos de la evolución de los primates: el momento en que adoptaron la posición vertical para moverse con soltura por árboles. Moyà y Köhler, del Institut Paleontològic Miquel Crusafont de Sabadell, han descubierto que el esqueleto de Pau tiene un diseño revolucionario para la época en que vivió, con innovaciones que se han mantenido hasta la especie humana.

Entre las innovaciones más importantes, destaca un tórax más ancho de derecha a izquierda que entre pecho y espalda para tener el centro de gravedad bien pegado al tronco cuando trepaba a los árboles. Al cambiar la forma del tórax, los omoplatos se quedaron sin espacio en su posición original a lado y lado del pecho; tuvieron que desplazarse hacia la espalda, lo que permitió al antropoide levantar las manos por encima de la cabeza y cogerse mejor de las ramas. Igualmente importante, los huesos de la mano y los del brazo quedaron unidos por una única articulación, y no por dos como en primates más primitivos, lo que permitió a la muñeca hacer dos movimientos hasta entonces imposibles: desplazarse a los lados como cuando se dice adiós con la mano o de girar como cuando se bate un huevo.

Todo ello permitió a Pau abandonar la posición cuadrúpeda que hoy día conservan monos como los de la selva amazónica y adoptar una posición vertical al desplazarse por los árboles similar a la de los chimpancés actuales. "Los humanos modernos ya no vivimos en árboles, pero hemos conservado la posición vertical y hemos aprovechado muchas de las innovaciones que hizo Pau a nuestro modo de vida", explica Salvador Moyà.

El rasgo más inesperado del esqueleto de Pau, que medía poco más de un metro de altura y pesaba unos 35 kilos, es que tenía los dedos demasiado cortos para colgarse de las ramas como los orangutanes, explican los investigadores en Science.La mayoría de especialistas en evolución humana creían hasta ahora que la habilidad de colgarse y la posición vertical se desarrollaron en el mismo momento. "Ahora hemos descubierto que no es así. Primero fue la posición vertical y después la capacidad de colgarse. Fueron dos acontecimientos independientes", señala Moyà.

Al analizar los fósiles, Moyà y Köhler vieron que eran tan distintos de todas las especies de primates prehistóricos descubiertas anteriormente que han clasificado a Pau como el primer ejemplar de una nueva especie. Le han dado el nombre científico de Pierolapithecus catalaunicus,que significa simio de Pierola catalán, explica Moyà. El nombre de Pau obedece a que es habitual dar nombres populares a los ancestros de la humanidad más emblemáticos, como el australopiteco Lucy o el driopiteco Jordi, y en esta ocasión el descubrimiento de Pau coincidió con las movilizaciones pacifistas contra la guerra de Iraq. Fue "nuestra bandera pacifista", declaró el paleontólogo.

Prueba de la importancia de Pau es que la revista Science convocó ayer una rueda de prensa en Barcelona para presentar el hallazgo. Se trata de la segunda rueda de prensa que la revista científica organiza en España en su historia; la anterior fue cuando se anunció el descubrimiento del Homo antecessor en Atapuerca en 1997.

Algunos de los principales especialistas del mundo en evolución humana han mostrado ya su entusiasmo por el descubrimiento. "Es un hallazgo maravilloso, un sueño hecho realidad", afirma Stephen Ward, de la Universidad del Ohio del Noreste (EE.UU.) en declaraciones recogidas por Science.Según David Pilbeam, de la Universidad de Harvard (EE.UU.), "es un gran esqueleto". El legendario Clark Howell, de la Universidad de Berkeley (EE.UU.), incluso visitó Hostalets de Pierola el año pasado para conocer el yacimiento y ver los fósiles.

El cráneo y el primer colmillo de Pau aparecieron el 5 de diciembre del 2002 en unas obras para arreglar una pista en el vertedero de Can Mata. A raíz de aquel hallazgo, se organizó una campaña de excavación en la primavera del 2003 que permitió elevar a 83 el número de fragmentos identificables de Pau. "Aún quedan muchos fósiles por extraer en Can Mata", señaló ayer Moyà. Los paleontólogos confían en completar el esqueleto de Pau y, "lo más importante, tenemos sedimentos que abarcan desde los 15 hasta los 8 millones de años de antigüedad". Con este material, afirma Moyà, "podríamos reconstruir lo que ocurrió en este periodo tan importante y tan desconocido de la evolución de los primates".

2 comentarios:

Anónimo dijo...

am...
esa foto es real?
tia te lo juro, se parece a un profe que tuve el año pasado
segura que es real y no le han hecho una foto para retocarla?

o eso o es familiar
no se...
con esto de que los monos pueden programar en perl...

achuchones

Anónimo dijo...

la foto esta muy bonita